La Agrupación de Empresas Cárnicas Exportadoras, AGEMCEX, ha emitido un comunicado para responder a las últimas noticias aparecidas en prensa sobre el precio de la carne de caza, y que reproducimos a continuación:
«Ante las reiteradas acusaciones dirigidas al sector comercializador de carne de caza, desde las industrias cárnicas nos vemos en la obligación de expresar nuestro profundo malestar por la difusión de informaciones incorrectas, infundadas y manipuladas. Estas declaraciones, provenientes del sector productor, no solo dañan injustamente la imagen de nuestras empresas y el sector, sino que también tergiversan la realidad del mercado actual.
La parte productora ha acusado a la parte industrial de una imposición injusta de los precios, así como la manipulación del mercado, rechazamos esto de una manera categórica, cosa totalmente falsa y no argumentada, en primer lugar pactar y manipular precios es algo ilegal, una acusación grave que se tendrá que demostrar, las lonjas marcan unos precios de referencia que están sujetos a una negociación individual, nunca son una imposición, que surgen de acuerdo a la ley de la oferta y demanda, aportando documentación al Presidente de la lonja, cosa que sí hemos hecho la parte industrial, desconociendo si la parte productora ha hecho lo mismo. Es palpable, según fuentes consultadas, que la parte productora tiene un problema evidente de pérdida de clientes en puestos de monterías lo que merma sus beneficios y quiere compensarlo poniendo un precio irreal y fuera de mercado de la carne.
En todas las lonjas celebradas, las negociaciones se han llevado a cabo de manera conjunta entre el sector productor y comercializador, con acuerdos firmados por ambas partes.
Es importante subrayar que el precio de la carne de caza, particularmente de ciervo y jabalí, está condicionado por las dinámicas del mercado internacional. En el caso del ciervo, el mercado está siendo afectado por un exceso de oferta y una escasa demanda, especialmente en los cortes más abundantes. Para el jabalí, la situación es aún más crítica, ya que Europa enfrenta una saturación de carne debido a la peste porcina africana (PPA), lo que ha provocado una caída de la demanda. En este contexto, debemos operar bajo las reglas del mercado internacional, ya que el consumo interno de carne de caza en España sigue siendo muy bajo en comparación con la producción, solo se consume en España entre un 5 y 10 % de la carne producida
El precio actual de los canales de ciervo en Europa clasificada de primera categoría es aproximadamente de 1,80 €/kg en origen, mientras que la segunda y tercera categoría están muy devaluadas, un precio determinado por la alta competitividad de las industrias europeas, que operan con costes significativamente menores. Estas industrias recogen los animales eviscerados y refrigerados directamente de los centros de recogida, lo que no solo mejora la calidad de la carne, sino que también reduce gastos operativos, permitiéndoles ofrecer precios más competitivos.
En contraste, la carne de caza de montería en España está considerada de menor valor y peor calidad microbiológica en el mercado internacional, lo que dificulta su comercialización. cámaras, sin disparos ni gastos adicionales de preparación, olvidan mencionar adjudicaciones a precios de 1,30 €/kg para ciervo y 1,10 €/kg para gamo, lo que muestra un claro interés de general crispación en el sector. Esta disparidad en los precios debe ser reconocida por el sector productor y no ocultada bajo falsas acusaciones.
El reciente desacuerdo en la lonja de Ciudad Real, el 9 de octubre de 2024, fue provocado por un intento unilateral del sector productor de imponer precios de 2,50 €/kg para el ciervo y 1,50 €/kg para el jabalí, lo cual no se ajusta a la realidad del mercado europeo. Ante esta situación, el presidente de la lonja decidió no proceder con la cotización, lo que refleja el carácter colaborativo de las negociaciones y desmiente cualquier intento de imponer precios por parte de nuestro sector.
Pese a múltiples intentos de diálogo por parte de nuestro sector, los representantes de AEOM se han mostrado inflexibles, insistiendo únicamente en la imposición de precios irreales.
Exigimos una rectificación pública e inmediata por parte del sector productor. De no ser así, nos veremos obligados a suspender nuestra participación en las lonjas y a reconsiderar la recogida de las canales de caza de las monterías, lo que podría afectar la celebración de las mismas cosas a la que en ningún caso nos gustaría llegar por el deterioro de la imagen de todo el sector.
En este contexto, nuestros servicios jurídicos están estudiando acciones legales para proteger nuestros derechos e intereses, tras las graves y falsas acusaciones, así como al linchamiento público al cual nos vemos sometidos.
Hemos intentado en varias ocasiones abrir un espacio de diálogo y seguimos abiertos a ello, para encontrar soluciones consensuadas que beneficien a ambas partes y garanticen la sostenibilidad del sector. Sin embargo, hasta la fecha, no hemos recibido ninguna respuesta. Resulta evidente que las preocupaciones del sector productor se centran exclusivamente en el precio de la carne, sin prestar la debida atención a factores clave como el consumo o la calidad, que son fundamentales para la estabilidad y crecimiento del mercado de la carne de caza.
Es esencial que trabajemos juntos, productores e industriales, para resolver esta situación de manera constructiva y asegurar el futuro del sector, sin imponer precios ni distorsionar la realidad del mercado actual«.