La caza con denominación de origen
CINEGÉTICA LA TROCHA es de esas organizaciones que nunca fallan. Y no nos referimos a los resultados, pues cazando en abierto y de la forma que lo hace Pablo López Lojo, el resultado, siendo importante, es lo de menos. Lo decimos porque montear con La Trocha nunca va a defraudarte en el concepto, en el fondo y en las formas, pues si por algo se caracteriza organización y organizador es por mantenerse fiel a sus principios caiga quien caiga, llueve, truene o ventee.
Y cuando uno montea con una organización con estos sólidos principios y fundamentos, lo normal es que los “sustos” sean mínimos y los “barrigazos” contados, pues todo lo que acontece durante la jornada cinegética es fruto de muchos meses de trabajo y de una dedicación total y absoluta.
Y luego la caza es caza, brava y salvaje, caprichosa o condescendiente, y unas veces te da, otra te quita y otras empata. Pero no hay desagradables sorpresas ni doble fondo. Aquí ni trampa ni cartón. Ni trato ni truco. De frente y por derecho.
Y eso se ha traducido este año en 8 monterías divertidas y de inmejorable relación resultado-precio que han dejado la nada desdeñable cifra de 340 reses sobre el cemento, con 235 jabalíes, 35 venados, 3 gamos, 2 muflones y 65 ciervas, con una media de poco más de 45 puestos por día y 42 reses abatidas por jornada. Ahí queda eso.
Todo ello cazando en aquellas agrestes sierras, de poder a poder y pocas veces con la climatología a favor de obra. No digo que me lo mejores, sólo que lo iguales.
Así es Cinegética La Trocha y así son sus monterías. Caza con denominación de origen, montería tradicional pura y dura sólo recomendada para aficionados de verdad.
Enhorabuena Pablo. Medio siglo tronchando monte acarrean estas cosas. Bendita montería.
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